lunes, 31 de diciembre de 2007

La primera entrada del año


Seis de enero, quiero hacer una entrada desde el primero del año pero no estaba segura de qué escribir, después de varias horas, y recién una llamada que se quedó en tonos no respondidos preferí escribir una entrada en el blog.
Los jugos gástricos me recuerdan que debo comer al menos dos veces al día, y que los sentimientos no se pueden quedar en la panza, tienen que salir sino se revuelven y hacen daño, y para daños con los que aparecen en la vida son suficientes.
Mis manos están frías y mi mirada cálida, pienso que el 2007 llevó la palabra prisa en cada día y este 2008 lleva la palabra melancolía ("La melancolía es la percepción de la fugacidad de las cosas. La percepción de la belleza sin perder de vista en ningún momento que se acaba, que todo termina." Rosa Montero).
La realidad efímera me llegó de golpe, con aroma a cacao y mazapan con recuerdo de jugo de naranja, olor cítrico fuerte que se mantiene en las pestañas, vacío la memoria mientras escribo, ya no recuerdo que más quería escribir, voy por el celular.

sábado, 22 de diciembre de 2007

Quiero ver La Brújula Dorada


Pero por lo pronto entré a la página oficial de la película http://www.goldencompassmovie.com/
y saqué mi daimonion, es un animal que es como el alma, según entendí, lo irónico es que me salió un león yo que nunca me he sentido identificada con ellos...

(Te Extraño)

Amanecí de mal humor, a las cuatro de la mañana (3:40) leí un cuento de José Emilio Pacheco y me identifique con el personaje: carga tanática, dubitativo...estoy enojada conmigo.
Mi vida es una pinche telenovela, tono medio, melodrama, y seguro es así porque así lo veo; mandaré mi caso a lo que callamos las mujeres, a alcohólicos o a neuróticos anónimos, me uniré al grupo de ayuda de cáncer de testículos.
Llevo un Te Extraño entre paréntesis en cada párrafo, ahora que ya no existe tu abrazo que me hiciera dormir hace tanto tiempo. Me siento una vieja nostálgica, respirando oxígeno y recuerdos.
Vivo entre lugares comunes, me obsesiona la muerte, la fragilidad, los grandes temas, las sandías. Sigo enojada.
Estoy hasta la madre de llevar la palabra incertidumbre en su más claro concepto en la mirada(Te Extraño).
Soy una mujer dolida y feliz, soberbia y tímida, yo no tengo la culpa de formar parte del 1% de la encuesta.
Trato de subir el tono de mi vida, dejar de ser tan melodramática, al menos no tanto, pensar en la pulgada, tomar agua. Está cayendo agua en el tinaco, me distraigo(?) no recuerdo que soñé, porqué estoy tan enojada, entiendo que me enojé conmigo por identificarme con un personaje como Andrés Quintana, pero este enojo sé que lo traía desde dormida, me gustaría entender la estructura de los sueños y recordar más seguido lo que me diga el subconsciente.
Sublimo, escribo sentimientos que se juntan en la panza "Oigo mariposas" y luego me preguntas que qué me gustó de ti: tus ñoñerías.
Dolida y triste enamorándome, lo último que quiero hacer es lastimarte, no ocupas el espacio de la grieta (veáse -más bien oígase- Cuando pase el Temblor de Soda Stereo) pero sanas la herida, eres tan raro.
No tengo sueño, tal vez por el café frío que tomé en la tarde. "Todo lo que pienses y sientas lo respetaré, espero que seas feliz conmigo" Como no me voy a estar enamorando.
(4:52) Apago la luz, intento dormir, le copio a José Emilio Pacheco la manía con los paréntesis, pero es que se ven tan bonitos...

jueves, 13 de diciembre de 2007

Andrea

Andrea, infinita en potencia, inexistente en acto, creció, envejeció y después nació, rompió en carcajadas, sumisa, hizo lo que le dio la gana, viajó, astral y físicamente, huyó con valentía, se despidió cobardemente, amó intensamente, traicionó.

Personaje femenino, delgada, morena, alta, conservadora, desinhibida, angosta de caderas, compleja de cintura, atlética, robusta, rubia, chaparrita cuerpo de uva, incomprensible, simple, tolerante, tímida, obscura.

Indecisa tuvo el coraje para asaltar un té, corrió, gimió, se revolcó entre alambres sinápticos, olfateó como gato cada hoja de un árbol, se dio un costalazo contra la banqueta, la aventaron de un auto, aguantó, mostró su enojo con un solo gesto durante la cena, sonrió.

Estudió hebreo, habló japonés, besó en portugués, amamantó en español, parió en inglés, murió en alemán, se aburrió. Lloró hasta despertar de un cortometraje a una tele novela, de un cuento a un correo spam, bailó mientras se fugaba de un guión… Gritó, a veces con razón otras no.


Andrea salió por el guión del cortometraje del Gabo, cuando lo leyó David, él me platicó que todas las personajes femeninos de los cortometrajes que hizo eran Andrea, como que se le venía a la mente ese nombre.

La última frase es por París te amo.

Otro blog, mismo nombre



La carne es débil, ahora no solo tengo una cuenta de hi5, sino también una dirección en blogspot, con el mismo nombre que mi antiguo blog, a aquel ya no le quiero mover nada, así que empezaré de nuevo por acá, se trataran los mismos temas: debrayes, proyecciones y cosas que me encuentro en el proceso.


Y pues esta primera entrada, como casi todos los principios de vida, comenzará sexosamente, y es que justamente me encontré un párrafo que me gustó en un blog que andaba leyendo , decía masomenos así "Cuando el sexo es un intercambio de energías y hay formas de elegir como hacerlo, se vuelve mucho más emocionante porque se torna entonces más digno de la condiciòn humana( cuerpo/alma)."

Casualmente ayer platique con unas amigas sobre tener algo sin feeling, y pues estuvimos de acuerdo, no importa si se oye muy ñoño, que es mucho más chido cuando la energía fluye, al pachequear, en una plática larga, en dormir con alguien, así simplemente dormir, está chido dejar fluir los sentimientos, sin tener que llegar a un encuentro sexual.
Después de un rato (y unas caguamas) debrayamos y terminamos hablando de hombres y faltas de sutilezas, y salió el tema de las rosas, al menos en mi caso es el regalo más chafa que he recibido, me ha pasado tres veces y esos tres hombres perdieron por default. Pienso que cuando te regalan una rosa es porque no se les ocurrió nada más, no indagaron para saber que flor te gusta o si acaso te gustan las flores, simplemente siguieron un convencionalismo de jardín de afuera de una iglesia, aaaaa se oyó muy ardido, espero que no sea un mal augurio y este se convierta en un blog de ardidezes.
Bueno dejando mi lado ardido y recordando la primera entrada del blog pasado: este espacio existe para ser usado como una forma de explayarse, proyectarse, como un escape de todo lo demás, de ese bulto luminoso que genera sombras, llamado realidad.
Así que aqui está la segunda parte de matando la decidia, para divagar, o para sublimar, como dirían mis amigas psicólogas.